Granada se prepara para recibir uno de los eventos musicales más esperados del año: Joaquín Sabina, el cantautor jienense que ha marcado generaciones con sus letras, aterriza con su gira “Hola y adiós” en la Plaza de Toros de Granada. Será del 25 al 27 de septiembre de 2025, en unas jornadas que ya están dejando huella antes de comenzar: dos de las fechas anunciadas se encuentran completamente agotadas.
Con una carrera que supera las cuatro décadas, Sabina no solo es un referente de la música española, sino también un símbolo de poesía hecha canción. Este tour, que muchos señalan como su última gran gira, tiene un aire de celebración y despedida. “Hola y adiós” no es simplemente un título, sino una declaración: el saludo a su público fiel y, quizá, la despedida de los escenarios que lo han visto crecer.
Un encuentro histórico en Granada
La elección de la Plaza de Toros de Granada no es casualidad. Este recinto ha sido testigo de grandes conciertos y espectáculos, y su acústica, unida al encanto de la ciudad andaluza, promete una experiencia irrepetible. La cita del jueves 25 de septiembre a las 21:00 horas fue la primera en agotarse, seguida rápidamente por la del sábado 27 a la misma hora. La expectación refleja la importancia del evento: Sabina es un artista que no deja indiferente a nadie y cuyas presentaciones siempre son vividas como rituales colectivos.
Información clave para los asistentes
La organización del evento ha puesto especial cuidado en garantizar la seguridad y la transparencia en la compra de entradas. Algunos puntos importantes a destacar son:
- Recepción de entradas: Los boletos se enviarán de manera digital al correo electrónico facilitado durante la compra, al menos 48 horas antes del concierto. Desde ese momento estarán garantizadas y acompañadas de un correo de confirmación con todos los detalles de la operación.
- Entradas nominativas: Con el objetivo de evitar la reventa en canales no oficiales como Viagogo o Stubhub, todas las entradas llevarán el nombre del comprador o de los beneficiarios designados. Esto significa que la persona indicada en el boleto será la única con derecho a acceder al recinto. En caso de que un comprador registre todas las entradas a su nombre, los acompañantes deberán entrar junto a él.
- Movilidad reducida: Para los asistentes con necesidades de accesibilidad, las entradas deberán adquirirse exclusivamente por teléfono al 911 832 651. En el caso de Granada, también es posible gestionarlas a través de la página web del recinto.
- Límite de entradas: Cada comprador podrá adquirir un máximo de seis boletos por operación. Una vez efectuada la compra, no se permiten cambios ni devoluciones. Además, la reventa está prohibida, lo que asegura la equidad en el acceso a los conciertos.
Una gira con sabor a despedida
El nombre de la gira, “Hola y adiós”, tiene un simbolismo especial. Joaquín Sabina ha expresado en varias ocasiones que esta podría ser su última gran gira, lo que convierte cada presentación en un evento cargado de nostalgia, emoción y gratitud. Para los granadinos y visitantes, esta será una oportunidad única de vivir en directo la magia de un artista que ha sabido narrar como pocos las luces y sombras de la vida cotidiana.
Expectación total y entradas agotadas
La respuesta del público ha sido inmediata: las sesiones en Granada del 25 y 27 de septiembre están agotadas. Esto confirma no solo la vigencia del artista, sino también el vínculo inquebrantable que mantiene con sus seguidores. Aún queda la esperanza de que se habiliten más entradas en caso de ampliación de aforo o liberación de localidades, aunque, de momento, el cartel de “no hay billetes” ya es una realidad.
Un legado que trasciende generaciones
Joaquín Sabina no es únicamente un músico, es un narrador de historias. Con discos emblemáticos y letras que han acompañado a varias generaciones, su paso por Granada será recordado como uno de esos momentos irrepetibles en los que la música se convierte en memoria colectiva.
El 25 y 27 de septiembre de 2025, Granada no solo acogerá a un artista: recibirá a un poeta que, con su voz rasgada y su mirada cómplice, dirá “hola” y, quizá, también “adiós”.